El filósofo francés Michel Onfray había tirado la primera piedra el año pasado, cuando publicó El crepúsculo de un ídolo. La fabulación freudiana. No se hizo esperar la respuesta intelectual. Que vino de una pensadora e historiadora de fuste: Elisabeth Roudinesco. En ¿Por qué tanto odio? (Libros del Zorzal), la autora de La familia en desorden busca desmontar los ataques de Onfray, al que acusa de haber fustigado a Freud sobre la base de errores, mitos y tergiversaciones (¿un Freud incestuoso, admirador de Hitler y Mussolini?). Pero el trabajo de Roudinesco apunta fundamentalmente “a comprender con mayor profundidad los motivos por los cuales la obra freudiana continúa suscitando semejantes pasiones”. Sobre el final, el libro presenta otros textos (Guillaume Mazeau, Christian Godin, Franck Lelièvre, Pierre Delion y Roland Gori) que enriquecen el debate.
viernes, 1 de abril de 2011
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
1 comentario:
La paideia griega tenía como propósito educar a la juventud en la virtud (desarrollo de la espiritualidad) y la sabiduría (cuidado de la vidmate verdad), mediante la práctica continua de ejercicios espirituales.
Publicar un comentario